viernes, 1 de mayo de 2009

De Santos y de Poesía.












Por Erika Said Izaguirre


Un agradecimiento a Celeste y a todos los demás,
en especial por las amistades que en la ex-hacienda germinamos.


Todo comenzó en el blog, cuando algunos nos dimos a la tarea de ir identificando las caras con sus nombres, y así no resultar tan extraños. Aunque para mí comenzó meses antes cuando vi la convocatoria en Tampico Cultural. La idea de asistir maduró una noche jalapeña donde me encontré invitando a escritores de todo el país a participar en esto que yo consideraba un encuentro más de artistas (de esos que implican estar en una sala todo el día y en la noche regresar solitario al hotel). A mi propuesta sólo obtuve un sí certero, de -qué casualidad- un tamaulipeco laredense. Entonces fui entendiendo de lo que se iba a tratar: encontrarme con las raíces que ya traía algo despegadas de mi suelo tamaulipeco. El título del encuentro se fue explicando per se, los santos días en las cabañas, la compañía de poetas para comer, cenar y desayunar -vamos, hasta para dormir-, la lectura de poesía entre follajes y fogatas, con el sol y la luna como testigos. Pero cual experiencia mística, la santidad sólo se vive una vez que has hecho algo memorable, un evocar a los muertos consagrados, como Alejandra Pizarnik, un ensayo de subjetividades que le dan cuerda al ratón de nuestro cerebro, quizá unos poemas inspirados en el lugar común, en mi caso una investigación que me costó varios insomnios.
Sabía que causaría polémica, esos temas siempre lo hacen, pero me gustó haber puesto en la mira un tema del que casi no se habla, así como me gustó aprenderles lo que casi nunca hablo yo. Y es que no había reparado en que sería la más joven; llegué hasta ahí limpia de prejuicios, sin especular que me toparía con un montón de gente más o menos sabia, cada cual en su área de mayor experiencia: que las letras, que el rock, que el arte visual, que la maternidad. Unos me recordaron a mis maestros de Letras, tocados ya por las canas, otros todavía irrigados en las polémicas de lo actual, pero todos (quiero pensar) del tipo de quienes aún saben lo que era escribir a máquina, no como yo, que la considero pieza de museo. Así entre lo visto y leído, oído y visto y analizado, descubrí detrás de esos escritores –y no sólo mi intuición me permite decirlo- a personas que algún día fueron jóvenes como yo, que traen puestos como segunda piel a los muchachos idealistas que también fueron alumnos, que ahora son maestros, editores, vegetarianos, trovadores, mujeres a contraluz de la hoguera donde en otro tiempo nos hubieran quemado, madres y padres de familia, amigos, amantes, músicos, poetas y locos.
La vida es sólo una, y durante esos Santos días, la poesía se hizo ninfa del bosque, el verbo se hizo carne, se me permitió discernir lo que hay detrás de un poeta: el humano, los sacrificios, la sed de reconocimiento, el esfuerzo calcado en cada una de sus composiciones literarias, la apertura hacia lo nuevo y la vista bien puesta hacia el pasado, cuando para ser poeta no se necesitaba de una computadora o de ser malhablado, sino, como hasta ahora, de un puñado de lecturas, una simple pero inefable obligación con el arte, un árbol milenario (sí, como El Abuelo) inspirando unos cuantos versos, y un estar rodeado de colegas, que sin importar su tendencia, su currículum o lo que hayan recorrido del mundo –también del mundo de las letras-, se comparten opiniones y se pasan las tortillas en la mesa. Algo así como juntar a Octavio Paz, Elena Garro y Julio Cortázar en un departamento de París, compartiendo allá muy lejos, su escritura y su latinidad; fuimos un copo de tamaulipecos participando nuestras experiencias y reflexiones, el día, la noche y (como era de esperarse) nuestro amor por la poesía.

Fotografías de Víctor Hugo Olivares

18 comentarios:

  1. Carta de contestación a una joven poeta

    Con qué invitando poetas de todo el país, eh. Sospecho que Celeste te iba dar comisión, mmm, sí, ahora lo recuerdo, parecías vendedora del sorteo TEC.
    Eso de noche de sábado en las cabañas “follajes y fogatas” “la luna de testigo” “evocar a los muertos” “experiencia mística” me suena como aquelarre de brujas.
    ¿Qué es “per se”?
    No existe gente sabia, ocurre tan sólo que existimos unos menos pendejos que otros.
    No hay mucho que discernir sobre lo que hay detrás de un poeta, al igual que en cualquier humano: el trasero y la espalda, con la salvedad de que la mayoría de las veces su figura contrasta con su gusto por la estética.
    Si no te conociera, juraría que disfrutas recalcándonos que somos unos ancianos escapados de un asilo. A mí sí me tocó la computadora, bueno, tuve una máquina de escribir, pero era eléctrica, de esas de disquete, lo juro.
    “para ser poeta no se necesitaba de una computadora o de ser malhablado” Baste recordar a Quevedo (1580-1645), y créeme que es una cita suave.
    Pero si honrar pretendes su memoria,
    Di que goce de mierda y no de gloria,
    Pues tanta lisonja se le hace,
    Di: Requiescat in culo, mas no en pace.
    Eso de copo de tamaulipecos me suena excluyente y discriminatorio para el extranjero de Nuevo León.
    Finalmente aprovecho la presente para recalcarte mi admiración y aprecio. Es más contagiosa que la influenza la humildad y el entusiasmo que le pones a todo. Me honra mucho tu amistad. Tal vez si es correcto llamar santos a los días en aquel lugar, tal vez algo hicimos mal, y como en una fabrica de poetas malditos, nos empaquetaron y sellaron fuera del paraíso de vuelta a los semáforos de la ciudad. No importa, nos queda el sabor de la manzana, y a mí en particular, en la bolsa izquierda del pantalón, un puño de estrellas que se encienden en una constelación que parece formar la palabra poesía, pero como no soy romántico, apenas me sirven para encender un cigarro. Hasta el año que entra a todos. (Bueno, a los que no hayamos muerto de vejez ¿verdad, Erika?)
    Juan Miguel

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  2. ¿Veo mal, pero se estaba durmiendo Arturo Castillo mientras Erika leía?

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  3. No sé en qué sueño va Castillo, pero podría jurar ante cualquier tribunal que Acosta está limándose las uñas.

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  4. Está verificando la cutícula. Jajajajajaja

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  5. Si esa foto se hubiera tomado un minuto antes se vería la mano de Acosta rascando la nuca de Castillo.

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  6. No te preocupes Erika, estoy enterada que cuando Castillo leyó su morfina, es decir su poesía, fueron más personas las que cayeron rendidas en los brazos de Morfeo, también supe que tuvieron que regalar cervezas para que la gente no se fuera y aguantara esa voz aguardentosa y ese poema repetitivo, aunque esto, aunque lo otro, aunque esto, aunque lo otro. . . . . más largo que la cuaresma.

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  7. ¿Será así como deciden los proyectos de las becas: dormidos y mirándose el esmalte? Y pensar que esa joven pasó insomnios preparando su investigación. Qué penita, la verdad. Esa foto no es para bromear Ginger y Randy (que dudo que sean sus nombres) esa foto es la viva imagen de la decadencia de personas que siguen mamando de las ubres del ITCA por tanto tiempo que se han dormido en sus laureles olvidando el compromiso que en un principio los llevó a ese lugar. Qué futuro tan incierto para nuestros jóvenes por estos burócratas que han perdido la capacidad de escuchar.

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  8. Por favor, bájele Don Juan Jesús, que es del dominio público que usted quería cobrar para ir ¿qué le pasa? Ni que anduviera de moda, antes diga que le iban a matar el hambre por dos días, y que lo iban a dejar vender su librito ese que lleva a todos lados y que yo no sé cómo no se le acaba, ya tiene más de veinte años. Y empezando por el título que se fusiló vilmente de una película de Liz Taylor, ya podrá uno sospechar el grado de originalidad que tiene los versos.

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  9. No me hagan reír, estupiditos, esos encuentros nomas los organizan para figurar y pescar un huesito de los que les aventaba cuando tuve el Power. Déjense de discusiones estériles. Tú, Aguilar, crees que por decirle a los jóvenes “qué onda chavo” ya estás actualizado; y tú, Castillo, crees que por fingir ronca la voz al leer ya estás al nivel de Juan Rulfo; y tú, Alba Iris, si quieres pasar de ser maestra de ceremonias deja de organizar encuentros y ponte a trabajar tus textos, ya supe que apenas llegó mi sucesor y ya te lo querías llevar a las cabañas, mira nada más que acomedidos. ¡Patéticos! Pero muy pronto regresaré a meterlos en orden.

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  10. ¿Qué no el señor Juan Jesús Aguilar fue también funcionario del ITCA? ¿No se acuerda que él también estuvo varios años: "mamando de las ubres del ITCA por tanto tiempo que se durmió en sus laureles olvidando el compromiso que en un principio lo llevó a ese lugar"?

    ¿No se acuerda de su librito ése que ya tiene veinte años se lo autopublicó sieno jefe del depto. editorial? ¿Será cierto aquello de que la memoria comienza a fallar después de cierto tiempo? Pero más todavía, ¿tiene miedo de que le quiten su lugar?

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  11. Hola.
    De las cosas que me estoy enterando en este blog. asi que mi tocayo Aguilar, salio muy aguila para la autocritica, seguramente dijo: "las nuevas generacones se merecen leer mi libro" mientras en los archivos de las computadoras del ITCA se virulean de viejos los trabajos premiados por autores nuevos en espera de que los publiquen y el señor aprovechando su puesto...que barbaro, esa debe ser la peor degradacion, con lujo de violencia, a la que puede llegar un autor.

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  12. Ese Juan Miguel cree que porque es enfermo mental ya es escritor, a nadie le interesa leer sus traumas ni pornografía barata. Por eso crítica a Erika, le tiene envidia. Si él tuviera un puesto haría lo mismo que el Castillo y el Aguilar. ¡ERIKA RULES!

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  13. Yo nomás notaba el aletargamiento del poeta Castillo y la mirada cuticular de Acosta. De lo demás no sé!!

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  14. tranquila, nena, Erika es mi amiga pero no puedes negar que se merecia el jaloncito de orejas, jaja, y no te sigo escribiendo porque me estoy poniendo mi camisa de fuerza porque me van a sacar a pasear, jaja.

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  15. Si, a mí también me fascina ver esa foto, tengo un sistema muy sofisticado de ampliación, si pudieran ver como baja ese hilito de mocos y se meten a la boca de Castillo, y ese Acosta es una loca perdida, toda ella mirándose las uñas, con sus pulseras de pedrería rosa y amarilla. Si esa foto la hubieran tomado cinco horas más tarde habríamos captado ese bezote destapa caños que se dieron en su cabaña.

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  16. Erika es la que esta "causando polemica" en la foto de los escuchas aletargados. y lo de ERIKA RULES: es porque en el pais de los ciegos el tuerto es rey, con eso de que es licenciada en crucigramas y tiene maestria en sopa de letras. ademas es una buena amiga, joven y talentosa (encuentra sabiduria de la doctrina todologa -pintura, rock, maternidad, etc.-hasta debajo de las piedras).

    ahora tu dime que onda con Celeste? movido por mi espiritu antibelico, y mi trauma de no haber sido consejero de la ONU, me ofrezco como intermediario para arreglar sus diferencias ya que pronto se veran en victoria, aunque soy de la idea de que es sano externar opiniones, ayuda mas el que te dice los errores que el que por amistad se los calla, en tanto, prometo pasarme por los blogs en cuestion para estudiar si exite contradiccion en los comentarios de celeste respecto a su conviccion de distanciarse de las autoridades o es acercamiento frustrado.

    y tu, linda, nena, relajate porque hoy amaneci particularmente filoso. como los doberman, me da por desconocer y ataco, jaja, no se crea, echele que estamos entre criaturas racionales. Y sabes que, si yo tuviera el puesto en el ITCA no haria lo mismo que ellos como dices, yo no publicaria otra vez sus libros, si a caso un par de los mios, jaja.

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  17. El ingenioso de Juan Miguel, te tardaste más de 24 horas para contestar eso, okys, procurare tenerte miedo, pero no te aseguro nada. Como no le pusiste comentarios a otra reseña, te le dejaste ir a la yugular a la más joven de todos, además mujer, eres todo un hombre, y claro que es tu amiga, por eso te atreves a criticarla, ¿sí sabes que casi le doblas la edad?, y cuando Erika tenga tus años, seguramente no estará escribiendo tonterías en un periódico de rancho. Y si encuentra sabiduría en los demás es por su capacidad receptiva y su humildad, no toda la gente es tan cerrada como tú comprenderás. De veras que no sé a cual irle, si a ti o al nefasto dormilón del Castillo, que si los apelativos fueran acorde con el intelecto debería apellidarse Choza.

    p.d. ¿La ONU?, creo que no, más bien amarrador de navajas en palenque clandestino.

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