martes, 30 de julio de 2013

QUINCE MOTIVOS POR LOS QUE VALIÓ LA PENA ESTAR EN LSDDLP 2013


Por Carmen Amato

De este encuentro rescato:

1.    La iniciativa de la organizadora Celeste Alba Iris y su equipo de trabajo para convocar poetas a Ciudad Madero y Tampico con el propósito de “intervenir horizontes … con el viento y el tiempo a favor de la poesía”

2.    La oportunidad de conocer a los poetas jóvenes participantes provenientes de diversos estados de la república mexicana.

3.    La oportunidad de conocer la voz y la obra de poetas grandes de Tamaulipas como lo son:  Gloria Gómez Guzmán, Arturo Castillo, Martha Izaguirre, Diana Zamora y Sandra  Ruth Sosa entre otros.

4.    La lectura colectiva de poetas participantes en el Centro Cultural Bicentenario.

5.    El Portal Electrónico con el trabajo de Celeste Alba Iris sobre mujeres poetas cubanas en el nuevo siglo.


6.    La exposición Fotográfica de Gabriela Chávez, “De la noche lo profundo” con textos poéticos de Romina Cazón.


7.    La música de Eli Isaí al presentar la Nueva música del Norte.

8.    El paseo a la Playa de Tampico que aunque breve nos permitió sentir su  brisa y su olor marino.

9.    Rescató la presencia de tres ángeles con alas que permitieron que este encuentro fluyera con más facilidad y alegría:  Lupita, Gracia y Ana Regina.

10. La diversión que afianzó la camaradería entre los asistentes con el Tarot Poético de Lucía Mendoza Cano.



11. El detalle de las botellas con mensajes propuesto por Sandra Ruth Sosa


12. Rescato la conducción de los eventos en las voces de quienes lo hicieron posible, Celeste Alba Iris, Lorena Illoldi, Marisa Avilés, y Jacobo Mina.


13. Y la experiencia de vivir cuatro días en medio de poemas, libros y poetas, en una ciudad que a pesar de la violencia que vive supo recibirnos con los brazos abiertos y mostrar sus dotes de anfitrión hospitalario.





14. Y por supuesto la posibilidad de participar en este Homenaje a Dolores Castro propuesto por los organizadores y la presentación del libro “Soy todo lo que vuela. Poemas de Dolores Castro y fotografía de Carmen Amato”.

15.  Rescato la paz, el amor, la amistad, el arte, y la poesía que vinimos a encontrar en este Encuentro… nos vemos el año que entra.



lunes, 8 de julio de 2013

Los Santos Días de la Poesía. El viaje continuado.


Wulfrano Arturo Luna Ramírez

Este quinto encuentro de poetas, primero al que asisto, ha sido para mí una experiencia tan grata como ilustradora, una ventana al mundo simultáneamente lúgubre y luminoso no sólo de la poesía sino de algunos de sus creadores, compañeros de andanzas, como la entrañable Arminé Arjona decía, hermanos de letras, de risas, de tardes calurosas entre olas y sol, y acompañantes de cantos en la madrugada.
Llegué junto con el amanecer, acompañado de mi muy querido amigo Alejandro Martínez. Un Tampico lleno de lluvia que se deshacía en pequeños alfileres acuosos en precipitada trayectoria nubes abajo. Inspiradora llegada, lo sentí con un abrazo fraterno, bienvenida que una tierra prometida nos ofrecía, dejándonos mojados y cargados de una ilusión expectante.
Nos fuimos directo a conocer el Centro Cultural Bicentenario, escenario donde se daría buena parte del encuentro y de ahí, a saludar al Golfo, en esa parte donde se comienza a hacer norteño, muchos kilómetros arriba de donde yo lo conocía. Tras hacer el primer contacto arribamos al hotel, donde un estruendoso evento nos recordó que estábamos en Tamaulipas, “cuídate mucho, que esas cosas pasan” me decían antes de partir.  Las cuchillas de un poste eléctrico nos habían jugado una broma.
El encuentro comenzó como es debido, con la inauguración de funcionarios, autoridades y poetas, y claro, autoridades poéticas, quienes nos dieron otro afectuoso recibimiento al dejarse escuchar, musicalizados, en un recital magnífico a cargo del Maestro Carlos Acosta. La tarde se hizo noche entre catrinas, ríos verdes y el calor de Ciudad Madero.
Durante el encuentro, conocí a poetas de varias partes, tamaulipecos la mayoría, otros exiliados voluntarios y gozosos que viven profusamente aprovechando las facilidades de las nuevas tecnologías y las pequeñas distancias, como apunto Lorena Illoldi, luchadora de letras, mujer fascinante que me arrancó más de una carcajada, presencia imprescindible; Mary Paz Mosqueda, Martha Izaguirre, Carmen Amato, Magdalena Guerrero, Andrea De León, Elí Loya, Lucía Mendoza, Gabriela Chávez y su sensible lente… , sobra enunciarlos completos, pues todos me dejaron una enseñanza, una ilusión de porvenir, un deseo de seguir vivo.Para todos, mi admiración, respeto y gratitud, su amistad ya es entrañable.
La visita a la Secundaria 19, una de las mejores experiencias, los muchachos tan participativos como nunca he visto, ni siquiera en la Universidad, fiel a los principios de los adictos veracruzanos, los invitamos a leer, y grande como agradable sorpresa fue que se animaran a leer. Caían de entre sus labios palabras y emociones, tupidos como la lluvia afuera del auditorio.
Lo que siguió fue un sembrar de vida, de inspiración y placentero asombro. Creo sinceramente que no fue un encuentro, sino un reencuentro. Grato fue ver de nuevo a Celeste, a Marisol, a Erika, a Ipatzi, e insisto, re-conocer las voces, en palabra, canto y música, de los demás compañeros.
Sea pues que estos Quintos Santos Días de la Poesía sean, la continuación de un viaje, de un sueño, de una realidad, y como dijo el Maestro Acosta, sembramos flores en el mar, y creo que ya están floreciendo.

Gracias a Celeste Alba Iris por la convocatoria y mi reconocimiento por el esfuerzo y la paciencia a ella y a todos quienes lo hicieron posible.

jueves, 4 de julio de 2013

Sin importar la dirección del viento



Por Celeste Alba Iris
E insisto: no hay quinto malo. Como prueba, la reciente edición del encuentro Los Santos Días de la Poesía que esta vez tuvo su sede en Ciudad Madero.
Durante cuatro intensos días se sumaron 32 escritores llegados de 7 estados de la República y de la vecina entidad americana, Texas. Se ofrecieron 2 recitales, 16 lecturas públicas – 4 de ellas en escuelas secundarias-, 1 exposición fotográfica y una sesión de trabajo literario denominada Coloquio Verbigracia.
Hicieron la distancia desde Ciudad Juárez, Querétaro, Tlaxcala, Chihuahua, Distrito Federal, Monterrey, Miacatlán y San Antonio, Texas. Con este motivo se recorrió Tamaulipas desde Nuevo Laredo, Ciudad Victoria, Ciudad Mante y Tampico.
Juntos volvimos a ese tiempo, ese territorio que recién fundamos en 2009 y dejando atrás el carácter intimista de la reunión, nos esforzamos por provocar el hallazgo con el verso.
Junto al artista mantense, Carlos Acosta, planeamos y ofrecimos el primer recital Poetamaulipecos, en el cual Carlos presentó una selección de poemas musicalizados de algunos de nuestros escritores actuales
.
Al día siguiente, durante el Coloquio se revisaron a 16 poetas tamaulipecos nacidos antes de los 70. Así, la propuesta de rescate y divulgación de las letras de nuestra entidad sigue cobrando forma a través de esta actividad. En el Centro de excelencia de la UAT y en Torratos Café Gourmet se reunió una muestra de la poesía del sur del estado a la cual denominamos Vecinos del Mar, con la participación de Sandra Ruth Sosa, Martha Izaguirre, Diana Zamora, Leslie Dolejal, Gloria Gómez Guzmán y Arturo Castillo.
Si hay algo que debería yo agradecer como coordinadora de este encuentro es la confianza que han depositado en mí los compañeros de la palabra, y algunas instituciones. ¿Qué acaso no hay algo más sagrado que un acto de fe? Creer es lo que nos sostiene y nos empuja a hacerlo posible.
Gracias también habré de dar a más de una persona, porque lo he dicho, el puesto no hace voluntades. Gracias a Libertad García porque desde su línea paralela se mantuvo presente, a Hernán Rocha por escuchar con atención, a Arturo Medellín que estuvo dispuesto, a Armando Reina por entenderlo e ir por más, a Antonio Suárez por los traslados y la guía, a Lizzet Pérez por abrir la puerta, a Ana Luisa Verduzco por esas búsquedas, a Martha Izaguirre por cumplir con su presencia a pesar del inminente naufragio, a Diana Zamora por aceptar el doble rol, a Ulises Britto por continuar cerca, a Lucy Nuñez por mantenerse al pendiente, a Filiberto, Lupita y Josefina por las citas escolares, a Gilberto Rivas por la memoria en imágenes, a Seleste Martínez por la buena gana, a Nudia Toscano, Jesús Guerrero y Josué Picazo por su eco permanente.
Mi reconocimiento a Juan Carlos Mata, quien se suponía era el chofer asignado, y aunque en realidad fue quien nos llevó y nos trajo de Victoria a Madero, se convirtió también en un aliado imprescindible para bien llevar las actividades diversas.
Mi cariño para Juan Villela que antes y durante Los Santos Días de la Poesía, supo ser una sombra discreta, una red de soporte, un trabajo sostenido. En este quinto encuentro, él fue pieza clave del engranaje para lograr cada uno de los eventos que dieron cuerpo a nuestro festival poético.
Y si de amigos escribo, ahora menciono a Lorena Illoldi y a Marissa Avilés quienes me ayudaron a mantener cada una de mis piezas en su lugar cuando las presiones diversas las desacomodaban.
Daré las gracias también a Lupita Guerrero, mi asistente quien estuvo al alba; y a otra que me iluminó con su entrega, Marina Alba Gracia, quien a sus trece nuevos y sonrientes años, le sobraba energía para andar y coordinar sueños a mi lado.
Aún sigue sorprendiéndome la taxonomía de las calidades humanas. He aprendido en este quinquenio a admirar a quienes dicen sí y actúan en consecuencia. He aprendido a respetar a quienes dicen no sin interferir el camino. Y de aquellos otros que nunca faltan, esos del sí pero no, no pero sí, su doble cara, múltiple discurso y más que bla bla, guruguru… he aprendido a mantenerme a distancia.

De lo más granado de nuestras letras, de los que se han quedado a escribir desde aquí, quienes han hecho la literatura tamaulipeca en estos años sin importar la dirección del viento, los entusiastas estuvieron ahí del 20 al 23 de junio en Ciudad Madero. Nunca tenemos la certeza de un próximo encuentro pero este valió la pena.